Los monjes benedictinos del Monasterio de Santo Domingo de Silos no solo se dedican a la música gregoriana, arte por el que son conocidos a nivel internacional; sino que también han realizado diversos estudios de botánica y farmacia, ya que como sabemos llevan desde el siglo XII haciendo licores para su consumo propio.
Gracias a la guía de estos monjes y con materia prima de Santo Domingo de Silos llega la ginebra premium castellana, Gin Silos. “Gin Silos tiene un ligero sabor a enebro tras 4 años y medio de trabajo” así lo cuentan sus creadores Emeterio Martín y José Carlos González. La idea surge de la combinación de enebros del pueblo, las enseñanzas de los monjes y la moda de la ginebra buscando la elaboración de un sabor diferente con marca y distintivo para la localidad burgalesa.
Actualmente, la venta se hace en la provincia de Burgos y en internet, aunque están a punto de llevarla a Madrid. Su producción ronda las 3.000 botellas, número que esperan aumentar sin sobrepasar las 10.000 ya que quizás sería complicado esta producción debido a la ardua recolección del enebro y su concentración en poco tiempo.